domingo, 16 de febrero de 2014

El perspectivismo

Sé que me avergonzaré en un futuro cuando lea estos cachos de mierda que escribí en este mismo momento. Pero ahora no, me siento orgulloso de empezar este blog a una muy buena hora y con ganas de dar mis mazazos a cualquier tema que yo vea conveniente.

En esta entrega de mis ''diarreas de furia'' llega el tema del *título* al que le he estado dando vueltas y no he llegado ni llegaré a una conclusión clara.

Me despierto como cualquier día normal, pensando en que quiero hacer hoy, ¡¡en que hay que echarle cojones estas putas horas que me da este maravilloso amanecer hasta que vuelva a dormir!!

Lo que está claro es que levantarse de ese imán corporal llamado ''cama'' es el primer obstáculo del día. Mucha gente se preguntará que es lo más rutinario del mundo, pero no, hay maneras y maneras de levantarse y es una cuestión importante.

En primer lugar, se encuentra ese despegue repentino de tu espalda sobre el colchón que lo haces más que nada para no quedarte pegado como una especie de lapa inútil a las sábana. Craso error, aquí ya la pifias al no dejar esos minutos rituales en los que disipar esa somnolencia/amargamiento con el que te levantas.

Después se encuentra el famoso ''Voy a dormir y a quedarme aquí acurrucado hasta que haya descansado a gusto''. Vamos a ver, obviamente estamos hablando del cómo despertarse en un día laboral, no de cuando estás en verano y el tocamiento de huevos se puede extender el tiempo que uno desee. Si haces ésto, lo probable es que duermas doce horas y solo tengas tiempo para ir a tu ''segunda casa'', comer, ducharse, comer otra vez, trabajar, trabajar, trabajar, disfrutar y morir en el lecho otra vez. Toda una fantástica experiencia. De verdad, me gustaría vivir así hasta el fin de mi existencia.

E-ehm, e-et-to, el indeciso, sí. No, no es una mezcla de ambas, si no que su esencia reside en ''¿Cómo me levanto?'' ''¿Me tomo hoy el día más suavemente y mañana más asperamente o mejor echamos ganas hoy para luego descansar el día siguiente?'' Después vienen las falsas promesas y los autoengaños que no se las cree ni el mismo. ''¡¡Hoy voy a reponer fuerzas para darlo todo más tarde y el próximo día aumentaré mi carga de trabajo!!''

Podríamos seguir hablando de tipos de despertares individuales, pero el último es el mejor. No, precisamente si te esperabas algo con un final más bonito y emotivo, te equivocaste: ''¿Hace falta salirse de la cama para llevar a cabo tus labores diarias?'' En parte sí, es cierto, pero se lleva al extremo el quedarse ahí pegados. Preveen que pasará esta misma situación con lo que se traen el desayuno, ya hecho de la noche anterior, a la mesilla para evitar infortunios no deseados. Es perfecto, increíble.

No, pero a esto no quería llegar, recuerden el título, en serio, no estamos hablando de camas porque yo estuviera en una escribiendo ésto, si no que decantarse por una opción u otra depende de nuestra percepción en ese momento determinado. Basta de porque soy yo y solo yo, haré esto siempre así. Habrá unos porcentajes que demuestren que normalmente hagas más eso que lo otro, pero no siempre, humano.

El punto de vista, sí. Una característica que va variando a lo largo del tiempo y que puede ser abruptamente modificada por las circunstancias que nos rodean. Sí, y que a veces nos hacen pensar por que miré de esa forma a esa persona y demás. Los estados de ánimos, sí, pero solo el estar cabreado puede trastornar por completo esa visión general que tenías hace dos horas cuando amabas a la humanidad por su interior.

Por eso mismo, si se aplica ese 'punto de vista' ahora en un texto que hayas leído, te sentirás de manera completamente distinta que si lo leyeras 2 años más tarde. El valor de los objetos, ideas, amistades, lolis... CAMBIAN. NADA ES ETERNO, JODER. OJALÁ LA FUERA PERO LA PERFECCIÓN NO EXISTE POR ESTO MISMO, PORQUE TU VAS CAMBIANDO, LA SOCIEDAD VA CAMBIANDO, POR ENDE, LA COSA ESA YA NO SERÁ TAN MAGNÍFICA.

Me intento aferrar a lo eterno, a lo que siempre valdrá, pero es imposible. Hay que seguir trabajando para no quedarse sin usar y disfrutar de lo que hay en cada segundo aunque sea duro tener que tratar con tus propias contradicciones.

Y sí, esto no se acerca ni a aprobado, pero habrá que empezar flojo, ¿no?